La saliva, ¡no solo humedece la boca!
La saliva es uno de los elementos más presentes en nuestro día a día, pero no solo se trata de un líquido claro y viscoso producido por las glándulas salivales.
Ésta mantiene la boca húmeda y ayuda a humedecer los alimentos para que puedan ser tragados fácilmente. También contiene enzimas que descomponen poco a poco los alimentos antes de que lleguen al estómago.
Otra curiosidad es que tiene un papel importante en el habla. Sin suficiente saliva, las palabras pueden ser difíciles de pronunciar y la voz puede sonar ronca.
Pero, ¿qué sucede cuando no hay suficiente saliva?
La disminución de su producción puede tener muchos efectos negativos en la salud. La sequedad de boca, también conocida como xerostomía, es un problema común que puede ser causado por varios factores, como la edad, ciertos medicamentos y algunas enfermedades.
La falta de saliva puede hacer que la boca se sienta seca, llegando a ser algo incómodo e incluso doloroso. La sequedad de boca también puede aumentar el riesgo de caries dental y enfermedades bucales.
¿Cómo mantener una producción adecuada
En este caso, será importante beber suficiente agua y mantenerse hidratado. También se deben evitar los alimentos y bebidas que pueden causar sequedad en la boca, como el alcohol y el tabaco. Además, es importante mantener una correcta higiene dental dónde se incluya el uso de hilo dental para prevenir la acumulación de placa y aparición de caries.
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